
El color de la fruta ¿qué nos indica?
¿Te has preguntado alguna vez por qué las frutas y las verduras tienen colores tan diversos?
El blanco de la coliflor, el rojo del tomate, naranja que da nombre a la propia fruta, amarillo limón, el morado oscuro de la berenjena o de la remolacha…
Lo cierto es que tanto frutas como verduras ofrecen una gama de colores que ni el arcoíris.
¿Pero de dónde vienen esos colores?
Las frutas y las verduras obtienen sus colores de componentes fitoquímicos, compuestos bioactivos naturales que, además de dar ese llamativo color, son beneficiosos para la salud.
De hecho, las frutas y verduras de colores más vibrantes y llamativos son las más ricas en vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes.
Se puede decir que cada color aporta unos beneficios al organismo
Pero este post no pretende ser uno de tantos que explique los beneficios de una dieta equilibrada a través de los colores.
Aquí nos vamos a centrar en cómo las frutas y verduras cambian de color a lo largo de su vida y qué nos está indicando eso.
El color de la fruta como indicador de madurez en la fruta
El color de la fruta puede proporcionarnos información sobre su madurez, sabor y valor nutricional.
A continuación, te enseñamos algunas de las principales interpretaciones del color de la fruta:
Verde: Las frutas verdes suelen estar inmaduras y no están listas para ser consumidas. En algunos casos, pueden ser amargas o astringentes.
Amarillo: Las frutas amarillas a menudo indican que están maduras y listas para ser consumidas. El sabor de las frutas amarillas puede variar desde dulce hasta ligeramente ácido, dependiendo de la fruta en cuestión.
Naranja: Las frutas naranjas suelen indicar que están maduras y contienen una gran cantidad de vitamina C. El sabor de las frutas naranjas puede ser dulce, ácido o una combinación de ambos.
Rojo: Las frutas rojas a menudo están maduras y contienen antioxidantes como los carotenoides y los flavonoides. El sabor de las frutas rojas puede ser dulce o ligeramente ácido.
Morado: Las frutas moradas suelen ser ricas en antioxidantes, especialmente antocianinas. El sabor de las frutas moradas puede variar desde dulce hasta ácido.
Es importante tener en cuenta que el color de la fruta puede variar según la variedad y el lugar de cultivo, por lo que el color por sí solo no es siempre un indicador fiable de madurez o sabor.
Hay que evaluar otros factores, como la textura, la fragancia y la firmeza para determinar si una fruta está lista para ser consumida.
Clasificación de la fruta según su color
La cantidad de fases de maduración de la fruta según su color puede variar dependiendo de la fruta específica. En general, se pueden identificar tres fases de maduración:
Fase de inmadurez de la fruta: En esta etapa, las frutas por lo general se caracterizan por:
- Color verde o amarillo pálido.
- Textura firme y dura al tacto.
- Puede ser amarga o astringente al gusto debido a los compuestos ácidos que se encuentran en la piel y en la pulpa inmadura.
- Aroma suave o ausente: Las frutas inmaduras pueden tener un aroma débil o ausente, lo que indica que aún no han alcanzado su pleno desarrollo.
- Dificultad para pelar: Las frutas inmaduras pueden ser difíciles de pelar debido a la adherencia de la piel a la pulpa.
En esta etapa, la fruta aún no ha alcanzado su pleno desarrollo y en ocasiones no es adecuada para su consumo. Incluso algunas pueden ser tóxicas o sentar mal al consumirlas.
Fase de madurez: En esta etapa, la fruta ha alcanzado su madurez completa y está lista para ser consumida. Las características de la fruta en esta fase son:
- El color. Varía según la fruta en cuestión, pero en este punto suele ser brillante y saturado.
- Además, la fruta suele estar suave al tacto y tener un aroma dulce y atractivo.
Aquí hay algunas características más que indican que una fruta está madura:
- Dulzura: A medida que la fruta madura, los azúcares se descomponen y se liberan, lo que le da un sabor dulce y agradable.
- Aroma: La mayoría de las frutas liberan compuestos volátiles que contribuyen a su olor característico. A medida que la fruta madura, estos compuestos se descomponen, se liberan y es cuando percibimos el aroma.
- Textura: La textura de la fruta madura es suave y jugosa, lo que la hace más fácil de masticar y digerir
Es importante tener en cuenta que la duración de la fase de madurez de la fruta puede variar según el tipo de fruta y las condiciones de almacenamiento.
Fase de sobremaduración: Durante esta fase, la fruta comienza a descomponerse y pierde su calidad y sabor. El color de la fruta puede oscurecerse o volverse opaco, y la textura puede volverse blanda o mohosa.
En esta fase, la fruta puede comenzar a producir un olor desagradable.
Es importante tener en cuenta que la duración de cada fase de maduración puede variar según la fruta en cuestión, las condiciones de almacenamiento y otros factores ambientales.
En este post te contamos qué factores que influyen en la maduración de la fruta
En las plantas industriales, tras la recolección, es necesario clasificar la fruta según diversos criterios. El tamaño, el peso, la densidad, y color de cada pieza determinará su calidad y maduración.
Con el objetivo de llevar a cabo una clasificación precisa, rápida y automática, desde Ingivision estamos continuamente mejorando nuestro software IngiGrader con un sistema de adquisición de imágenes con IA (Inteligencia Artificial) para la evaluación de la calidad externa del fruto.